Escribimos este post, para aconsejar a toda esa gente, que tras el confinamiento por el COVID-19, ha querido salir a correr después de que el gobierno permitiera realizar actividad física al aire libre.
Todos los consejos que te vamos a dar son ideales para empezar a iniciarte en mundo de la carrera, pero recuerda que ponerse en manos de personal cualificado y que lleve un control de tus entrenamientos, es la mejor manera de alcanzar tus metas.
En Studio LT, tenemos los medios necesarios para que alcances todos estos objetivos y llegar a correr de la forma más saludable.
Antes de echarte a la calle y empezar a correr, debes saber si estás física y mentalmente preparado para ello. El Correr es una actividad física sana, pero que tiene mucho impacto en tu cuerpo. Si tienes alguna lesión o algún problema de salud, lo mejor es que visites a tu médico o fisioterapeuta, te recuperes bien y luego te plantees, con la ayuda de un especialista, empezar a correr.
A continuación, te dejamos varios pasos o consejos, que te podrán ser de ayuda.
Fortalecimiento muscular
Lo primero que debes hacer, antes de empezar a correr, es preparar y fortalecer tu cuerpo, para que cuando inicies la carrera, no sufra tanto por el impacto que esta actividad genera.
La mejor forma para prepararte, es realizando entrenamientos de preparación física general, es decir, para todo el cuerpo. El corredor implica todo su cuerpo cuando sale a correr, y por eso debemos prepararlo en su totalidad. Cuanto más fortalecido tengas todo el cuerpo, más protegido estarás y menos lesiones o problemas tendrás en el futuro.
Empieza poco a poco
Al empezar tu entrenamiento, lo que debes de hacer, es un buen calentamiento, tanto a nivel articular como muscular, esto te va a prevenir de posibles tirones o calambres musculares.
Antes de ponerte a correr, haz una progresión que haga que tu cuerpo se acostumbre. Empieza por caminar a un ritmo lento y adecuado para ti, y a partir de ahí vete subiendo el ritmo hasta que termines corriendo. Al ir poco a poco aumentando el ritmo, notarás como tu cuerpo se va adaptando a la marcha y tú te sentirás mucho mejor.
Y para finalizar el entrenamiento, haz una vuelta a la calma, con una carrera o caminata suave y unos buenos estiramientos para descargar bien tu cuerpo.
Entrena por Tiempo
Las carreras se miden en distancia, por lo que es común salir a correr y contabilizar tus entrenamientos en kilómetros. Sin embargo, si eres un corredor principiante lo más recomendable es que entrenes por tiempo. Si decides entrenar aumentando el tiempo que aguantas corriendo y no tu distancia, vas a poder controlar la duración de tus entrenamientos, regularás mejor el ritmo de tu carrera, te sentirás más motivado y, además, seguramente disfrutes más de tu entrenamiento.
Centrarte en la distancia que quieres recorrer y el ritmo que quieres llevar, solo provocará que desvíes la atención de tu verdadero objetivo que es, disfrutar del entrenamiento y mejorar tu forma de correr.
Alcanza tus Metas
Ponte metas a corto plazo y que puedas conseguir, esto te ayudará a mantenerte motivado y progresar en tu vida como corredor. No importa lo pequeño que sea tu objetivo mientras sea suficiente para mantenerte motivado.
Con esto quiero decir que empieces por cortos plazos de tiempo corriendo o por distancias cortas, metas que tu cuerpo pueda soportar. No pienses en competir a corto plazo porque no estarás siento realista contigo mismo. Céntrate en una meta alcanzable a largo plazo y luego divídela en pequeños objetivos, que con el tiempo irás consiguiendo, para un día llegar a alcanzar tu meta final.
Una manera de saber si vas consiguiendo estos objetivos es escribir y guardar todos tu tiempos o resultados, de esta manera verás una progresión de cómo el primer día y en poco tiempo, te cansaste y no podías más, y al cabo de 20 días eres capaz de hacer el doble o el tripe de ejercicio. Así poco a poco te irás acercando a tu meta final.